Por suerte, los secretos suelen escaparse por las rendijas, y de ese modo algunos han llegado a mis manos.
Esta frase es del profesor de la Universidad de La Coruña, Mauro Fernández, que acaba de publicar unos datos que nosotros dejamos de pedir hace tiempo, convencidos de que en la Xunta los guardaban bajo siete llaves. Nuestro último intento de acceder a ellos dio lugar a uno de los post más leídos de este blog, que publiqué con el título
"El sainete de la Xunta" . En él relataba la casi cómica visita que hice a las dependencias de la Xunta, y el comportamiento de Jesús Oitavén Barcala, Secretario General Técnico de la Consellería de Educación, personaje siniestro donde los haya.
¿Era tan raro lo que estábamos pidiendo? No, en absoluto. Todos los años la Xunta pregunta a los padres de los niños de Infantil cuál es la lengua materna de sus hijos. Se trata, pues, de una información valiosa para conocer la realidad del uso de las lenguas en Galicia. Unos datos mucho más fiables que los de las encuestas del Instituto Gallego de Estadística, que además nos cuestan una pasta. Los datos que pedíamos eran de 2009, datos directos de más de 44.000 niños (la encuesta del IGE se basa en un muestreo de 850).
Mauro Fernández ha conseguido una parte sustancial de estos datos y los muestra acompañados de unas reflexiones. Se agradece que hable del asunto con bastante honestidad, alejado de esloganes y bobadas. También se agradece que se refiera a nosotros como "defensores de los derechos individuales". Sin embargo creo que habría sido más lógico mencionar a Galicia Bilingüe directamente en lugar de dar tanto rodeo. Queda un poco artificioso, en mi opinión, aludir a nosotros incluso en plural o mencionando la "más numerosa recogida de firmas en Galicia" sin decir quien la llevó a cabo. Será el diezmo que paga Mauro Fernández por abordar este asunto con cierta valentía; no le pidamos que sea valiente del todo, que eso nosotros y el señor Oitavén Barcala sabemos que sale bastante caro.
Mauro Fernández cree que es mejor que no se tenga en cuenta la lengua materna de los niños en la escuela, ni siquiera en infantil. Dice que al tratarse de lenguas parecidas y en contacto pueden aprender en las dos, porque ambas conocen. Parece olvidar que estamos hablando de niños muy pequeños, y de lo importante que es adquirir la lectoescritura en lengua materna. Si pensamos en los que ya son mayorictos, precisamente por ser lenguas parecidas, la interferencia de códigos es mucho más notoria, como bien sabemos los profesores, que nos estamos acostumbrando a leer el idioma híbrido en que escriben muchos alumnos. Por no hablar de su absoluto desconocimiento de terminología en español, obligados en Primaria y Secundaria a estudiar en gallego todas las asignaturas con manejo de textos.
Para apuntalar lo que dice, que los niños gallegos de Infantil deberían ser enseñados en ambas lenguas, Mauro Fernández cita una frase que nosotros mencionamos a menudo, y lo hace añadiendo una apostilla que, en realidad, lejos de dar veracidad a su afirmación, lo que indica es lo contrario. Tal vez un número significativo de sus lectores no sean conscientes de esto porque Don Mauro cita el segundo párrafo en inglés. Es evidente, si se traduce correctamente, que la UNESCO solo hace una excepción en la defensa de la lengua materna como medio de instrucción, en los casos de niños que viven en un entorno donde se habla una lengua con mayor poder de comunicación.
Es axiomático que como mejor aprende un niño es en lengua materna"..."It is axiomatic that the best medium for teaching a child is his mother tongue"
Fernández señala que esta frase no suele ir acompañada, como él cree que debería, de esta otra del mismo informe: "There may, however, be circumstances which justify abandoning the mother tongue very early in the child´s formal education. For example, if the child´s tongue may be closely related to a more widely used language".
Si de lo que se trata es de conservar el gallego, los datos muestran que tras 30 años de políticas de ingeniería social, el número de gallegohablantes se está reduciendo de forma inexorable, porque ya ocho de cada diez niños gallegos son hispanohablantes.
El intento de gestar un idioma sustituyendo las palabras parecidas al español por otras alejadas de la lengua a la que el gallego tiende a parecerse, está conduciendo a la existencia de dos variantes que cada vez se alejan más, la que hablan en casa las familias que lo han ido transmitiendo de generación en generación, y la variante oficial. Si se sigue inculcando a los niños en el colegio, y a los adultos a través de la TVG y otros medios, el deplorable mensaje de que lo que hablan no es gallego sino castrapo ¿con qué argumentos se pide que se lo trasmitan a sus hijos?
Los padres que hablan a sus hijos el gallego oficial suelen vivir en un entorno urbano donde la mayoría de niños es hispanohablante. Suelen ser personas muy interesadas en su transmisión.
Es verdad, como dice Mauro Fernández, que están surgiendo voces entre este sector que proponen la elección de lengua para que los niños gallegohablantes conserven la suya. Llevo años diciendo que acabarían por darse cuenta de que no va a ser posible eliminar al 100% el español de las escuelas de Galicia como intentaron hacer cuando gobernaban nacionalistas y socialistas y que, así, los hijos les vuelven a casa "convertidos al castellano" como literalmente lamentaba Anxo Quintana. En todo caso, es posible que los niños gallegohablantes de las ciudades adquieran la lectoescritura en gallego, vale la pena dedicar a esto los recursos necesarios.
Elegir lengua es posible, se hace en todos los países con más de una lengua oficial. Se establece una demanda umbral y en los pocos lugares donde eso no sea posible, se opta por un sistema en ambas lenguas con derecho a usar los libros y expresarse oralmente y por escrito en lengua materna. Lo explicamos en nuestra proposición de ley. Precisamente porque ambas lenguas son parecidas, es suficiente estudiar la otra lengua como asignatura para que haya una sensata intercomunicación. La enseñanza obligatoria en las dos lenguas no es necesaria y nunca contentará a los nacionalistas, la torpedearán como han estado haciendo en Galicia desde que se implantó, negándose muchos profesores a impartir clase en español, inscribiéndose en listados de profes insumisos, saltándose el decreto, cambiando el libro de mates en español por su apuntes en gallego, y lo más sorprendente, haciendo todo esto amparados supuestamente en la voluntad de los padres de sus alumnos. Si las familias eligiesen formalmente estudiar en una lengua y se legislara adecuadamente para proteger el cumplimiento de este derecho, otro gallo cantaría. Y, muy importante, es imprescindible que exista una linea en español para que haya una real libertad de movimiento de los españoles con hijos en edad escolar por el territorio de su país.
Os dejo con el estudio de Mauro Fernández y os recomiendo su lectura si os interesan estos asuntos; en su conjunto vale la pena. Muchas gracias Don Mauro por compartir estos datos, aunque he de decirles a los lectores de mi blog que con esta frase de su artículo que copio como despedida, Mauro Fernández nos desvela un secreto pero nos traslada uno nuevo, que no es en realidad un secreto inexcrutable porque nos proporciona una pista muy sugerente.
"Mi informante me pidió no hacer uso de ellos mientras pudiera perjudicarle un eventual descubrimiento de su identidad. También me pidió, antes de morir, que no hiciese público su nombre"
Los datos secretos del gallego y los límites de las políticas lingüísticas
Entrevista al autor del estudio en Praza Pública
Feliz fin de semana, amigos. Cuidaos mucho.