sábado, 27 de junio de 2015

Hasta la vuelta


Banco de Loiba. Fotografía de La Voz de Galicia

Esta semana no os voy a hablar sobre libertades individuales o sobre la defensa de derechos lingüísticos. Tampoco comentaré alguna de las diversas noticias que se generan cada semana en torno a ello, ni os relataré la última fechoría u ocurrencia de los talibanciños, talibanets y talibanarras. Y eso que entre estos enemigos de la libertad ha habido de todo estos días, desde un nuevo ridi de los talibanciños  intentando colarse en la ONU, hasta la disolución del grupo ultra Nós-Up, viejos conocidos de Galicia Bilingüe porque tuvimos que padecerlos en numerosas ocasiones. En casa, en GB, tuvimos también una semana movida atendiendo quejas, que siempre se incrementan a comienzo y a final de curso. Tuvimos de todo, desde profesores a quienes pretendían rechazarles sus memorias de curso porque las entregaban en español, hasta inocentes padres primerizos que nos piden listados de colegios donde se pueda estudiar en español.  

Hoy me asomo al blog para despedirme hasta septiembre. Por primera vez en ocho años voy a disfrutar de mis vacaciones de profe completas. Andaré de aquí para allá sin posibilidad de conectarme a internet  de manera pautada. Tengo también pendientes algunos proyectos (me horroriza esta palabra) a los que deberé dedicar tiempo de reflexión. Serán, pues, dos meses de viajes cortos, pensadas largas, escritura, paseos por el bosque, y tranquilidad contemplando las estrellas. 

Nos veremos en septiembre. Durante el mes de julio podéis seguir nuestras noticias en Twitter.

Si queréis enviar algún comentario será bienvenido, pero no los voy a poder publicar.

 Un abrazo amigos, que tengáis un feliz verano.



sábado, 20 de junio de 2015

Cambio del retrato del Rey por el de Castelao y "o leite" del desayuno por leche sin normalizar




La noticia de que dos alcaldesas del BNG han estrenado su mandato retirando el retrato del Rey y la bandera de España de su despacho, ha coincidido con el aniversario de la proclamación del Rey Felipe VI. Hace un año os hablaba en este blog de su primer discurso, alabando su acierto al incluir un saludo en varias lenguas co oficiales, y lamentando la mención laudatoria al xenófobo Castelao, algo debido,  casi seguro, a que sus asesores no han leído las "obras" del profeta del nacionalismo gallego, lo que por otra parte es bastante habitual, ya que leer a Castelao es un castigo si no se comulga con sus ideas disparatadas, de manera que se suele opinar de oídas, dando por bueno lo que dicen de él los del club de fans de Breogán. No deja de resultar curioso que un año más tarde, una de esas dos alcaldesas que han descolgado el retrato del Rey, lo hayan sustituido por el de Castelao. En la prensa de Galicia esto fue muy comentado, tanto lo de Castelao como el asunto de las banderas. Hasta el PP, dando muestra de una notable hipocresía, reprobó lo sucedido con la enseña nacional. 




Y hablando de actitudes hipócritas, también tiene su aquel lo que le pasó esta semana al alcalde de La Coruña, Don Xulio Ferreiro el de las Mareas, mientras estaba siendo entrevistado por Pepa Bueno en la Ser a primera hora de la mañana. Cuando estaban en plena charla, tuvieron que suspender la entrevista por un simpático problema doméstico, ya que mientras el alcalde hablaba, de fondo comenzaba a oírse el lloriqueo de un niño que decía algo sobre la leche del desayuno. Parecía que un hermanito le estaba haciendo una faena. Finalmente, tras pedir disculpas, se oyó al alcalde decirle, o decirles: "Vale. No pasa nada. Tú pasa para afuera. Venga". Y a un niño que contesta, "¡No quiero, no quiero!"


Así, tal cual, desayuno en lengua impropia.

Cada cual que hable el idioma que le venga en gana y considere conveniente, y con sus hijos lo mismo. Si este señor piensa que hablarles en español, o en inglés, en esloveno, o en árabe en casa les viene bien para su futuro, pues eso. Pero me sorprende que alguien que sólo se expresa en gallego en público, que promueve homenajes a "las gentes que trabajan para que la lengua no se muera",  que afirma: "La Marea tiene un compromiso real con la lengua gallega, y piensa promoverla mediante la seducción y las propuestas en positivo" que sostiene que"Sin voz, sin lengua (gallega), no hay vida digna", o que suscribe un programa electoral en el que promete" fomentar la lengua gallega tanto en la administración como su uso social"; digo yo que es normal que me resulte curioso que alguien que afirma todo esto, haya elegido el español como la lengua de su vida familiar y la de sus hijos. Además, don Xulio Ferreiro, el de las mareas podemitas/nacionalistas, dice que quiere aplicar el Plan de Normalización, con el que se pretende "galleguizarlo" todo, principalmente en la enseñanza y en cualquier ámbito relacionado con los niños y los jóvenes, desde los campamentos de verano hasta las discotecas. A mí este proceder me recuerda al de algunos dirigentes nacionalistas que nos metían con calzador la enseñanza sólo en gallego, pero se llevaban a sus hijos a estudiar a Reino Unido, o a los del PP de ahora, que nos enchufan las asignaturas más interesantes en gallego pero escolarizan a sus hijos en caros centros privados donde la Xunta hace la vista gorda con la normativa para que ellos, los de primera, puedan estudiar en español. Pura hipocresía, la de unos y la de los otros. Os lo decía antes, cuando me refería a la actitud de aparente indignación del PP de Galicia ante la retirada de la bandera nacional de los despachos de esas nuevas alcaldesas. Mirad la foto que viene a continuación, es de la sede de la Xunta en Santiago, ¿cuál es la única bandera que ondea allá arriba? Pues eso. 




Os dejo el corte con el detalle del desayuno de los peques de Xulio Ferreiro

"Perdona Pepa. Tengo follón en casa"

sábado, 13 de junio de 2015

Desconsideraciones, travesuras y tribulaciones de un enchufado de la Xunta




Lo de la Xunta es el sainete que no cesa. Por lo visto, Tele 5 ha estrenado una nueva comedia de situación tipo "La que se avecina", pero  esta vez el escenario es un crucero de cutrelux. A ver cuando se pasan por San Caetano y graban las idas y venidas de algunos gabinetes Conselleiriles.  Si no fuera por los trastornos que ocasionan sería para troncharse.

El jueves recibimos la queja de unos jóvenes padres que intentaban sin éxito recibir la cartilla sanitaria de su bebé en español. Hace cuatro años, a otros padres les sucedió lo mismo y conseguimos que la Consellería de Sanidad, tras remitirles a una página web donde podían descargar los documentos en la "apestosa" lengua de Cervantes, prometieron que, a partir de entonces, se imprimirían las cartillas también en español. Sí, ya lo sé... somos un poco ingenuos. Pero es que yo para estas cosas soy muy básica, creí que era de esperar que cumplieran su palabra cuando se trataba de algo tan sencillo. Nos equivocamos, está claro.

Ayer no tenía que entrar en clase hasta después del recreo, así que llamé a la Consellería, eran las nueve y media. Hablé con la secretaria de la Conselleira, le expliqué de qué se trataba, que los padres querían marcharse del hospital con su cartilla, y me dijo que aún no había llegado la persona que llevaba ese tema, que me llamarían en cuanto llegara. Me puse a corregir exámenes mientras veía cómo pasaba el tiempo sin que hubiera respuesta. A las once y veinte llamé yo, en diez minutos tenía que salir hacia el instituto. Me atendió la misma secretaria que la vez anterior había intentado pasarme con el responsable, pero no había manera, "un momentiño... ahora le paso... ya le paso... no sé que pasa que no puedo pasarle... un momentiño... a ver ahora... le paso... no se puede". Once y  media. Me pasa con otra persona. Tengo que volver a contarle toda la película, y finalmente me dice que no es cosa suya, pero que me llamará la responsable en unos minutos. Le digo que lo siento, pero que ya no puedo, que tengo que salir de casa y, por la calle, con el ruido no se oye nada. Me despido. Al llegar al insti, vuelve a sonar el móvil. Aún no ha tocado el timbre, me meto en el baño de dirección y respondo. Al otro lado, la Jefe de Servicio del asunto. Me dice que no existen las cartillas sanitarias infantiles en español, que la Xunta sólo las imprime en gallego. Eso ya lo sabía yo porque antes había enviado un mensaje a algunas matronas y pediatras de GB y me habían dicho que hay cartilla de embarazada bilingüe, pero que la de los niños no existe en español. Será que la normalización empieza ya antes de que puedan hablar. Me dice la Jefe de Servicio que sería muy caro hacer cartillas en español. Le digo que los padres castellano hablantes también pagan impuestos. Me dice que los padres que nos han llamado pueden descargar un pdf desde una web. Le digo que hace cuatro años sucedió lo mismo y se comprometieron a arreglarlo. Me dice que entonces ella aún no estaba en ese puesto y me sugiere que envíe un escrito de petición. Le dije que lo intentaríamos por  otras vías. Suena el timbre, tengo que colgar, me dice que me manda los documentos por e-mail, no tengo tiempo para deletrear nada; le digo que bueno, que los puede enviar a través del contacto de nuestra web. Corto. Antes me dice que les trasladará mi queja a sus superiores. Pues muchas gracias.

Al llegar a casa a mediodía veo que habían enviado dos emails. Abro el primero. Adjuntos envían unos documentos incluida la cartilla, que al desplegarse parece como de Liliput. Abro el siguiente correo y veo el mismo mensaje con los mismos documentos. Qué raro, me digo, el otro es igualito que este. Vuelvo al email anterior, lo leo de nuevo y comienzo a bajar. Me entra la risa al recordarlo; es que son como niños, tanto sueldo y tanto despacho y no saben enviar  un correo sin borrar sus desahogos. Os lo pongo, conviene que los ciudadanos estemos informados, es una buena muestra del desprecio que sienten estos cargos elegidos a dedo por las personas que les pagamos el sueldo. Un pena que tantos funcionarios de carrera tengan sobre sus cabezas a estos enchufados y, utilizo enchufado como sinónimo de cargo a dedo, o de libre designación. Así abrevio y todos nos entendemos.

 Va. Lo escribo de forma literal, respetando los errores de conjugación de verbos en gallego y otras erratas. Tiene tanto de español, se nota tanto que se le escapa del subconsciente,  que lo vais a entender aunque no sepáis gallego. Qué original es nuestra Xunta, en pocos lugares un cargo de este rango comete tamaños errores de expresión. Seguro que si escribiera en su propia lengua lo haría mejor, pero hay que seguir el ritual...

"Parece ser que chamou muy enfadada ao gabinete da conselleira a presidenta de Galicia Bilingüe, Gloria Lago,  solicitando unha carpeta de saúde infantil en castellano. 


No existen, o que se imprime está en galego, pero na web está todo en castelán tamén. Finalmente falou con Julia e lle dixo que buscáramos o enderezo de contacto na web de Galicia Bilingüe e lle mandáramos ali os documentos en castelán. 

Me parece moita cara pola banda da señora nin molestarse en mandar un correo de solicitud ou prestarse a dar un.

Eu non bou buscar.

Reenvío documentación a remitir que pasa Julia por si parece oportuno enviala."

Firma Xurxo Hervada Vidal, Subdirector Xeral de Información sobre Saúde e Epidemioloxía y está hablando con  la Directora Xeral de Innovación e Xestión da Sáude pública, que fue quien nos envió el e-mail. Al menos, al esta señora sí le pareció oportuno enviarnos la información.

 1 Me alegro de que a pesar de no haber usado palabras malsonantes, de no haber subido el tono de voz, y de haber acabado la conversación diciendo sólo que resultaba incomprensible que molestaran a la gente, con lo fácil que sería respetar sus derechos, se hayan dado cuenta de que estaba muy enfadada. Bien.

 2. Ni dije que buscaran dirección alguna, ni pedí que me mandaran nada. Fue la Jefe de Servicio la que me lo ofreció y, a falta de tiempo para ponerme con el consabido info-arroba-Galicia Bilingüe-todo seguido-en minúscula-punto es-no olvide excluir la diéresis, a lo que seguiría la repetición por su parte infoarrobagaliciabilinguepuntoes, le dije, que podía mandarlo a través del contacto de la web de la asociación.

3. Me encanta el final: "por si parece oportuno enviala" 


Señor Hervada: "cara pola banda", la suya. Ustedes no cumplen con su obligación de respetar la cooficialidad lingüística desde los cargos en los que disfrutan de unos generosos sueldos que nosotros les pagamos. Además de esto se permiten darnos lecciones y menospreciar a los que tenemos la "osadía" de pedir aquello que por derecho nos corrsponde, en este caso, usar y poder guardar como recuerdo un documento significativo como la cartilla infantil de nuestros bebés, por no mencionar el inconveniente que supone tener que utilizar una cartilla en gallego cuando tienes que cambiar de lugar de residencia con frecuencia, como les sucede a estos padres. Por la tarde enviamos queja al Valedor del Pueblo de Galicia. Veremos.

 Esta semana se especulaba en los medios con la fuga de Feijóo a Madrid. En los digitales había bastantes comentarios de gallegos que decían ¡Llévenselo, se lo regalamos! Si no fuera porque sería como aspirar la alfombra del comedor para después vaciar la aspiradora sobre la alfombra de la sala de estar, me sumaría a los comentarios y añadiría mis deseos de que se lleve con él a todos los Hervadas de su corte. En la foto tenéis a este señor que fue nombrado hace años como cargo de libre designación. Es una imagen de una entrevista en Faro de Vigo en la que habla sobre los efectos de la gripe. ¡Qué cosas! con lo seriecito que parecía.

PD.- La STC 31/2010, respecto al derecho a recibir las comunicaciones en castellano dice "siempre que se arbitren los mecanismos pertinentes para que el derecho de los ciudadanos a recibir tales comunicaciones en castellano pueda hacerse efectivo sin formalidades y condiciones que redunden para ellos en una carga u obligación que les constituya en la posición de sujeto activo en sus relaciones con la administración pública".

sábado, 6 de junio de 2015

Feijóo, mejor no te vayas a Madrid



Imagen de Faro de Vigo

Acabo de llegar de Bayona, donde hemos despedido a un amigo de José Manuel que se ha ido para siempre. Pensé que me vendría bien sacudir la tristeza con una infusión de hierba Luisa (que ya tengo aquí a mi vera) y entretenerme con las idas y venidas del blog. Revisando las visitas, comprobé que hay bastantes dirigidas al perfil. Lo escribí hace ¿cuanto?... cuatro años. Al leerlo de nuevo me detuve en algo que decía entonces sobre esos fines de semana que los políticos de los grandes partidos pasan en  sus tensas convenciones. En fin, que reflexionaba sobre esa vida que a mí me parece banal y un tanto triste.

Esta tarde hemos estado con amigos de José Manuel, compañeros de la infancia, personas unidas por el cariño. Me gustaría saber qué espacio les queda para la vida y las relaciones con sabor a verdad a los pululantes de esos grandes partidos, me pregunto qué clase de personas pueden ser felices siempre expuestas al fuego amigo, y me pregunto si es normal que hayamos asumido que para ellos y, por lo que se ve, para los medios que nos ¿informan? sea más importante su carrera política que el bienestar de los ciudadanos.

Desde hace algún tiempo, sobre todo desde las ultimas elecciones, se está especulando sobre el futuro político de Feijóo. Que si se va a Madrid, que si se queda en Santiago, y venga y dale, día sí y día también va la prensa amorosamente embadurnando con cremita el ombligo del presidente. Pareciera que no resulta vergonzoso decir en voz alta y con total desparpajo, que lo que mueve al eterno aspirante no es el bien de sus convecinos, sino su carrera política, una carrera tan larga como su vida laboral.  

Es una lástima que habiendo tanta gente buena dispuesta a dedicar su tiempo y su esfuerzo a mejorar la vida de los demás, haya tan pocas personas de esa pasta que decidan dar un paso al frente e implicarse en la vida política. Sin ir más lejos, estoy pensando en gente que tengo cerca y que dedica su vida a estos menesteres: los colaboradores de Cáritas, los miembros de la asociación de Ventura Pérez Mariño, que ayudan a alimentar a familias en apuros, los profesores que enseñan en su tiempo libre a alumnos sin recursos, y en tantas otras personas no sólo generosas sino también muy capaces, con cabezas bien amuebladas y un código ético luminoso. Pienso que ahora que están cobrando fuerza estas Mareas que tan mala pintiña me tienen (ojalá, ojalá me equivoque), echo en falta ese mismo empuje entre la gente con una ideología más moderada ¿Será que las personas de extrema izquierda están más motivadas? ¿Tendrán razón quienes sostienen que el fanatismo nacionalista activa resortes cerebrales similares a los que mueve el fanatismo religioso? Recordemos que la Marea de Santiago, por ejemplo, es un mejunje entre nacionalismo y socialismo. ¿Será, tal vez, que la gente más moderada teme la exposición y siente pereza ante la vida de partido? ¿Serán más acomodaticios?.

Aquí, por ahora, tenemos lo que tenemos. A un lado un frente popular/populista que los nacionalistas han ido colonizando, como pudimos ver quienes seguimos la evolución de este movimiento desde el 15-M, y  al otro lado un PP acosado por la corrupción y de capa caída.

Anoche vi al Vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, siendo entrevistado en la tele de La Voz. Juraría que apareció más repeinado, menos gris, y con el aire del que se sabe destinado a cumbres más altas.

No le aconsejo a Feijóo que se vaya a Madrid. No le deseo ningún mal ni, como podéis comprender, tengo motivo alguno para esforzarme denodadamente en que alcance la felicidad, pero me ha dado por coger vela en este entierro, dicho sea metafóricamente. No es fácil saber como evolucionará el mundillo de los partidos en España teniendo en cuenta que la situación actual es tan de sube y baja como la noria del Prater, pero creo que su marcha a Madrid le acarrearía más tristezas que su permanencia en Galicia. Imaginemos que Podemos y sus filiales empiezan a hacer el indio, que el PSOE no crece, que la economía va de perlas, que el PPdG empieza a remontar. Aún así no creo que Feijóo pudiera llegar a ser designado sucesor. Tiene demasiados muertos en el armario y sus contrincantes en la carrera sucesoria u otros cualesquiera los harían desfilar, y esa su Santa Compaña, deterioraría irremediablemente la imagen que O noso Presidente ha estado mimando durante  años con esmero de cultivador de orquídeas. En Galicia, sin embargo, estaría a salvo - no molestas, haya paz-.  El día que tuvo lugar la manifestación de Galicia Bilingüe en 2009, el presidente de La Voz de Galicia publicó uno de sus escasos editoriales. En él apostaba por un cambio de gobierno. Olió el cambio y acertó porque poco después, Feijóo desalojó del poder al PSOE-BNG. Estos días ese mismo periódico parece estar cambiando de rumbo el barco. Huele a fin de ciclo. Las perspectivas para Feijóo de cara a las autonómicas gallegas no son nada halagüeñas. Aún así, creo que cometería un error si se fuera.  Si aquí disparan balines, en los madriles lanzan bombas de neutrones. Más le valdría quedarse e intentar  remontar. Resortes no le faltan, incluida la apisonadora del PPdG. Eso sí, compadezco al que se cruce en su camino ¡si lo sabremos nosotros!